miércoles, 14 de abril de 2010

La merienda del mosquito

Los dípteros son uno de los órdenes de insectos más odiados por los seres humanos. No es de extrañar, pues entre sus representantes nos encontramos con las omnipresentes moscas domésticas, que lo mismo succionan carroñas y excrementos que heridas abiertas y alimentos, por lo que además de ser siempre un fastidio pueden ser fuente de infecciones. Otros dípteros poco apreciados son los tábanos, de dolorosa picadura, los torpes moscardones, las brillantes moscas azules y verdes, y sobre todo, los mosquitos.

Los mosquitos forman la familia de los culícidos, muchas de cuyas especies tienen una considerable importancia médica. Entre ellos está el temible Anopheles, vector del paludismo. En nuestra latitud nos pica un mosquito con un aspecto parecido, el Culex. En general su picadura no pasa de ser molesta, aunque en ocasiones puede inocular unos pequeños gusanos nemátodos, las filarias, parásitos de los humanos.

Es de dominio común que solo las hembras son hematófagas, es decir que se nutren de sangre, mientras que los machos lo hacen de savia vegetal. El vídeo nos muestra una hermosa hembra merendando. No se pierdan el antes y el después de su abdomen, justo al revés que en esos anuncios de fajas mágicas. Y también justo al revés que en los anuncios, aquí no hay trampa ni cartón.






(Vía zwielback)

3 comentarios:

  1. Joer, esto ni es ciencia ni es ná, qué asco de bichos repuganantes, habría que exterminarlos a todos ¡puag!

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  2. Un amigo mío biólogo sostiene que la mosca común a pesar de la reputación que tiene de bicho asqueroso que ronda excrementos, es un insecto muy limpio. Si se observa durante rato a una mosca no es difícil ver como ésta se limpia casi de manera compulsiva, primero sus patas, con sus patas las alas y la cabeza, con las alas el abdomen, etc.
    Sin duda que mi amigo se refiere a las moscas que tenemos por estas latitudes, porque las moscas tropicales (la mosca tse-tse, por ejemplo) son bastante menos inofensivas.
    El vídeo es estupendo, sorprende ver el cambio en el abdomen del mosquito (mejor dicho, mosquita). Después de ese atracón no sé como puede remontar el vuelo tan fácilmente.

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  3. El video es genial, es como si nosotros nos zamparamos un yogur de 50 kilos así de una sentada.

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